El viaje de Narciso (George)
Imagen Sawyer y Narciso (George).
29 de octubre. El pueblo de Letur despierta un día normal y corriente, sin saber ni sospechar de las riadas que más tarde se llevarían sus sueños, amigos y casas y dividirían el pueblo en dos, dejando una cicatriz permanente que todavía sigue presente.
El agua se lleva también a animales de compañía y comunitarios que convivían en el pueblo. Entre ellos está Narciso, un gatito naranja que llega arrastrado por la corriente desde quién sabe dónde. Se aferra con todas sus fuerzas a unos tablones de madera. Varios compañeros de Gatureños lo encuentran y entre riadas, consiguen rescatarlo.
Él no entiende qué está pasando, pero se vence a la bondad de quienes quieren ayudarlo, sin oponerse.
Lo llevamos el veterinario. Allí nos dicen que está desnutrido y tiene un problema de cadera y de encías. Tiene que quedarse unos días. Lo dejamos allí, preocupados, pero confiando totalmente en los profesionales.
Narciso no tarda en recuperarse. Le han quitado unos dientes que estaban infectados y le están haciendo rehabilitación para la cadera. Come mucho y es muy cariñoso, tanto que la veterinaria Almudena, de Animal House Albacete, se enamora de él. Nos dice que le gustaría quedárselo, pero no puede. Finalmente, las analíticas salen bien: es hora de buscar una familia. “Gracias Almudena, es hora de continuar mi viaje”, parece decir Narciso cuando se despide.
Una pareja de Ayna, Victoria y Rubén, se ofrecen a acogerlo hasta que podamos encontrarle un hogar. Lo cuidan como uno más y en los días que Narciso pasa con ellos vuelve a ser un gato normal, cariñoso y siempre en busca de mantitas donde dormir calentito.
Mientras, compartimos su historia en redes y decenas de personas se interesan por él. Desde Huellamania nos ayudan compartiendo la historia, al igual que Pienso Feral, que nos ofrecen comida gratis para su futura familia. Así conocemos a Sawyer, una americana afincada en Barcelona que se enamora de Narciso desde el primer minuto. Nos conocemos por videollamada y lo tenemos claro: Sawyer es la persona ideal para cuidar de Narciso.
El viernes 22 de noviembre, Narciso se despide de Victoria y Rubén y el equipo de Gatureños. “Gracias por todo, Victoria y Rubén”, se lee en sus ojos. Sale de Letur para llegar a Barcelona, su última parada en este viaje tan largo, donde Sawyer lo espera con latitas, una camita calentita y mucho amor.
“A pesar de todas las cosas horribles que ha pasado, es un gatito dulce y cariñoso”, dice Sawyer, que ha decidido empezar la vida nueva de Narciso, con un nombre nuevo también: George.
Gracias, Sawyer 🧡